Las cinco cosas que deberías saber de Kelly Slater

Espiritu Aloha | mar 21, 2018

Kelly Slater es el mejor en su área. Lo ha sido siempre y lo será. Aunque se le resista el 12º título mundial o no lleve a Pamela Anderson colgada de su brazo. ¡Kelly es el rey! Y esto es algo indiscutible. Lo saben sus fans, sus haters y hasta sus compañeros de profesión. Es el dios de los dioses del olimpo del deslizamiento sobre las olas.

Durante décadas, Kelly ha deslumbrado al mundo con su surfing, pero siempre preservando a buen recaudo su vida personal. Con los años, Slater se ha ido soltando y, poco a poco, ha venido relatando curiosidades y peripecias de su vida privada.

  1. Quería ser ventrílocuo

De niño, Kelly soñaba con ser ventrílocuo. De hecho, uno de sus primeros regalos de Navidad fue una marioneta. Años más tarde, sus gustos cambiaron y decidió que quería ser actor cómico, pues le encantaba Steve Martin. Ya sabemos cómo son los niños…

  1. Empezó a surfear con un bodyboard

Kelly empezó a surfear (de pie) con un bodyboard con quillas a la edad de 5 años, antes de tener su primera tabla de surfing a los 8 años.

“Fue a esa edad cuando realmente supe que iba a ser surfer. Era esa época en la que un chaval intenta definirse a sí mismo. Me dije, ¿sabes qué? ¡Creo que voy a ser surfer! Y adquirí esa identidad para siempre…”

  1. Terminó secundaria antes de ser pro 

El bodyboarder Mike Stewart fue una de las grandes influencias para Kelly a la hora de terminar el Bachiller.

Me dijo, el Instituto es fácil. Si no eres capaz de terminar Secundaria, no podrás terminar nada en la vida. Así que terminé el Bachiller con sobresaliente…

  1. Quería ganar más de un título mundial

Lo supo desde el principio. Su objetivo era ganar más de un título mundial.

Tom Curren era mi héroe y había ganado tres. Mark Richards ganó cuatro del tirón, así que yo quería ganar cinco títulos mundiales.

  1. Su madre y su hermano fueron su inspiración

Kelly y su hermano mayor, Sean, eran muy competitivos. De pequeños solían competir en todo tipo de actividades. Desde fútbol hasta surfing, una lucha que le llevó a lo más alto.

“Competíamos en todo y me dije: Tengo que ser mejor que él en el surfing. Voy a ser el mejor. Y me obsesioné con el tema…”

Su madre, Judy, también ha tenido mucha influencia en la personalidad competitiva y luchadora de Kelly.

“Con 18 años trabajó para la NASA. Más tarde, cuando yo tenía 8 años, se unió al Cuerpo de Bomberos. ¡Fue la primera mujer bombero de todo el condado!”

Fuente: www.redbull.com.es